Argentinos abarrotaron las calles de Buenos Aires en protesta al Gobierno de Mauricio Macri y las medidas de austeridad promovidas por el FMI.

Con una multitudinaria marcha que se desplazó desde el Obelisco a la Plaza de Mayo, diversos sectores argentinos aprovecharon el Día de la Independencia de Argentina para gritarle al Gobierno de Macri: la independencia no se negocia.

Durante el festejo estuvo notablemente ausente el gobierno, que tuvo que suspender el desfile militar por el descontento que existe actualmente en las Fuerzas Armadas argentinas debido a los salarios y medidas que se han tomado contra ese sector.

La movilización fue convocada por Abuelas de Plaza de Mayo, la Asociación Argentina de Actores y una serie de organizaciones políticas, sociales, sindicales y ciudadanas que marcharon para expresar su rechazo no sólo contra el FMI y las políticas gubernamentales, sino también contra la construcción de bases militares de Estados Unidos en el país.

Durante un pequeño acto oficial, sin presencia de público, Mauricio Macri reconoció que Argentina está pasando por una tormenta económica fruto de muchas circunstancias, entre ellas temas de su propia gestión, de los mercados externos, de las políticas de gobiernos anteriores.

 Igualmente, destacó el apoyo que recibió del FMI con el que el 20 de junio pasado se firmó un crédito stand-by por 50 mil millones de dólares para fortalecer el programa económico. Hasta ahora se han entregado 15 mil millones, pero la crisis se agudiza y el aumento del dólar continúa.

El FMI ya tiene funcionarios en los ministerios claves, lo que se añade a miles de despidos no sólo en el sector público, sino también en el privado, como lo destacó la Unión Industrial Argentina (UIA) con la pérdida de más de dos mil 300 empleos por día.

Redacción Lechuguinos