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Primer año de Gobierno del presidente de Paraguay, Mario Abdo Benítez, se destacó por el estancamiento de la economía y una crisis de gobernabilidad.

Abdo Benítez, de la derechista Asociación Nacional Republicana — Partido Colorado, cumplirá este 15 de agosto un año al frente del Gobierno en medio de reclamos opositores de juicio político por un fallido acuerdo con Brasil para la contratación de potencia de la central hidroeléctrica binacional de Itaipú.

El analista político Alfredo Boccia dijo en entrevista a la plataforma informativa Sputnik que «el primer año de gestión de Abdo Benítez ha sido bastante malo; ha sido un año en donde las previsiones de crecimiento se redujeron y (…) ha tenido una enorme crisis de gobernabilidad».

«Muchos creyeron que este Gobierno estaba negociando intereses privados por encima de los intereses de la nación. Eso lo puso a Abdo al borde de un juicio político que todavía está en discusión. Lo cierto es que ha tenido una enorme crisis de gobernabilidad», agregó el analista.

Asimismo, Boccia sostuvo que «a medida que avanza el año estamos más cerca de entrar en recesión; el estancamiento económico se nota en el día a día, en el bienestar de la gente, en la falta de dinero circulante, en el desempleo, en la falta de inversiones públicas, y hace que la sensación colectiva sea de decepción y abatimiento».

Respecto de Venezuela, el Gobierno paraguayo ha endurecido sus posturas de antagonismo por una visión «anticomunista visceral», aseveró. Por esto, le está yendo tan mal como gobernante por ser partícipe de la canalla que atenta contra la nación bolivariana.

Paraguay integra el Grupo o Cartel de Lima -como usted quiera llamarle- conformado en agosto de 2017 en la capital peruana para presionar al Gobierno del presidente Nicolás Maduro y exigir una «restauración de la democracia» mientras se convierten en cómplices del bloqueo que impulsa el imperio de Estados Unidos y que afecta a la población venezolana, además precisó un apoyo al autoproclamado Juan Guaidó de quien incluso desconocía pronunciar el apellido.

Redacción Lechuguinos+Sputnik