Medios occidentales fake rusia ucrania

En tiempos de posverdad y sociedad hiperconectada, la detección de noticias falsas o «fake« están a la orden del día cuando de manipulación mediática se trata.

Y el caldo de cultivo del conflicto Rusia y Ucrania, ha incrementado los fake en su mayoría por el uso de los laboratios de tanques del pensamiento de Occidente.

Muestra de ello son los algoritmos entrenados para hacer ver sólo una parte de la realidad del conflicto, y también la preparación de escenarios trucados, con una producción hollywoodense, propios de las transnacionales mediáticas antiRusia.

Pero así, como las redes sociales se han volcado en un maremágnum de opiniones, información y hasta rumores; estas plataformas también se han encargado de desmontar cuando un hecho es de dudosa procedencia.

¿Y la ética periodística?

Un caso peculiar fue el empleado por la comunicadora española Susana Grisso de Espejo Público para mostrar un supuesto bombardeo real. La falta de rigurosidad periodística permitió utilizar imágenes de ArmA 3.

Se trata de un videojuego de combate táctico dentro de mundo abierto militar, desarrollado para Steam y lanzado el pasado 12 de septiembre de 2013.

Todo para generar revuelo en la audiencia, sobre supuesto bombardeo ruso contra asentamientos cíviles de Ucrania.

Aún cuando, en repetidas ocaciones, desde el ministerio de Defensa ruso y autoridades del Kremlin han desmentido; así como denunciado la proliferación de «fake news», y videos totalmente descontextualizados.

https://twitter.com/JulianMaciasT/status/1496912420601745413?s=20&t=YcdVMo-hE9F8iumnbsMObg

Otro bulo, desde el lado español, muestra cómo la cadena española Antena 3 noticias, intentó alimentar más la desinformación; cuando hizo pasar una explosión en China en 2015 como si fuera un bombardeo ruso en Kiev.

 «Llevan 8 años ocultando las masacres de Ucrania en Donbás y ahora siguen mintiendo», increpan usuarios en redes.

https://twitter.com/JFjusticiafuser/status/1496867194306707457?s=20&t=iRu1yxj7AGDcpElscgV0_A

Y otro como si fuera extraído del teatro del absurdo, muestra sin desparpajo la fecha de 2020, en atención a un sobrevuelo, algo que no se corresponde con la realidad.

Redacción Venezuela News