Jordan Goudreau, el cerebro detrás de la fallida Operación Gedeón del 3 y 4 de mayo de 2020 para secuestrar al presidente venezolano Nicolás Maduro, acusó al gobierno de Estados Unidos de intentar matarlo y se comparó con el fundador de WikiLeaks, Julian Assange, y el ex contratista de la NSA convertido en denunciante Edward Snowden en declaraciones a un reportaje de Rolling Stone publicado el domingo 6 de diciembre.

Quien funge como director ejecutivo de la firma de seguridad privada Silvercorp, encargada de ejecutar el complot mercenario contra el Gobierno Bolivariano, reveló que el FBI llevó a cabo una redada en su casa de Florida el 21 de mayo pasado y afirmó que los agentes federales planeaban asesinarlo para borrar los rastros que vinculan a la Casa Blanca con la Operación Gedeón.

«Me quité la camisa. Y no tenían ninguna razón para ejecutar el death-by-cop (un método de suicidio en el que una persona apunta con un arma de fuego a un policía armado «obligando» al agente a disparar). Pero conocían mis antecedentes. Sabían que tenía un arma», dijo Goudreau a Rolling Stone.

Goudreau dice que sigue siendo investigado por el Departamento de Justicia, aunque aún no se han presentado acusaciones, y teme que puedan encerrarlo fácilmente durante mucho tiempo, tal como han intentado hacer con Assange y Snowden.

«Si el Departamento de Justicia quiere perseguirme, pueden acusarme por haber caminado imprudentemente y luego meterme en prisión durante 20 putos años. Es raro en este mundo tener tipos como Julian Assange, y es raro que tipos como Edward Snowden realmente vean algo que está jodido y digan: ‘¿Sabes qué? Voy a intentar arreglarlo’. ¿Sabes por qué es raro? Es porque estos gobiernos se unen y simplemente los destruyen», dijo el ex soldado de las fuerzas especiales convertido en mercenario.

Goudreau también desestimó las afirmaciones de los líderes de la oposición venezolana y la administración Trump de que no tenían nada que ver con la fallida Operación Gedeón, sugiriendo que se atribuirían el crédito instantáneamente si todo hubiera salido según lo planeado.

«Si hubiéramos tenido éxito, ¿de verdad crees que la administración [de Juan] Guaidó habría dicho: ‘No somos nosotros, no queremos tener nada que ver con esto’? ¿Crees que Donald Trump habría dicho: ‘No éramos nosotros’? Cada hijo de puta con el que hablé habría dicho: ‘¡Éramos nosotros! ¡Estados Unidos, baby! Se habrían atribuido el mérito de todo. Y si dices que no es verdad, eres bastante ingenuo», insistió Goudreau.

El mes pasado, Goudreau presentó una demanda por incumplimiento de contrato de 1.4 millones de dólares en un tribunal de Miami contra el asesor y financiero opositor venezolano Juan José Rendón.

Rendón afirmó en mayo que la oposición venezolana cortó los lazos con Goudreau después de que supuestamente no cumplió su promesa de financiamiento y personal para la operación. Goudreau ha acusado a la oposición de escatimar en un contrato de ‘servicios generales’ de 213 millones de dólares con Silvercorp, que según él obligó a los posibles mercenarios bajo su liderazgo a recolectar donaciones de migrantes venezolanos que viven en Colombia para financiar su plan.

En su demanda, Goudreau también reveló que Erik Prince, fundador de la firma militar privada Blackwater, ofreció una oferta competitiva para derrocar al Gobierno Bolivariano de Venezuela. Un abogado de Prince dijo que esta afirmación no era cierta.

En agosto, un tribunal venezolano dictó condenas de 20 años de prisión a Luke Denman y Airan Berry, la pareja de mercenarios estadounidenses involucrados en la Operación Gedeón, por los delitos de conspiración, asociación, tráfico ilícito de armas de guerra y terrorismo.

A estas declaraciones se unen las hechas por el director de Silvercorp en octubre pasado al Nuevo Herald, donde afirmó que la Casa Blanca conocía los detalles de la fracasada incursión mercenaria armada en Venezuela.

Misión Verdad