Muerte-Colombia-Desnutrición
Foto: Lechuguinos.com

En lo que va de año, han muerto 17 menores de edad en el norte de Colombia consecuencia del alto grado de desnutrición

La pequeña Yosaila Pushaina,  de 3 años, de la etnia wayúu, es otra víctima que se suma a la estadística de muertes por grave cuadro de desnutrición en La Guajira colombiana, consecuencia de la casi nula atención que reciben los pueblos ndígenas de la zona por el gobierno de Juan Manuel Santos.

La menor llegó con un cuadro crónico de desnutrición a un centro clínico en la cabecera municipal de Riohacha, donde posteriormente perdió la vida.

Este caso se suma a otros 16 niños que mueren de hambre en lo que va de 2018, en un pueblo donde estás criaturas siguen muriendo de hambre, por no tener agua, alimentos, transporte y menos un servicio de salud digno que mitigue el daño que deja la ausencia de estas necesidades básicas.

Esta situación no es desconocida para el gobierno colombiano, sin embargo este mantiene toda su atención en tapar las múltiples tramas de corrupción, asesinatos con su mejor excusa, el incesantemente ataque a Venezuela.

Así, junto a la ceguera selectiva de Santos, organismos como la Organización de Estados Americanos (OEA), mantienen sus planes desestabilizadores, mientras la población indígena muere en Colombia por la inacción de su gobierno.

Redacción Lechuguinos