El gobierno de los Estados Unidos presiona a los jueces del Tribunal Constitucional de Cabo Verde para que no se pronuncien en el caso del diplomático venezolano Alex Saab, en una vergonzosa demostración de injerencia.

El gobierno de los Estados Unidos presiona a los jueces del Tribunal Constitucional de Cabo Verde para que no se pronuncien en el caso del diplomático venezolano Alex Saab, en una vergonzosa demostración de injerencia.

Las autoridades judiciales de Cabo Verde se han puesto de espaldas al derecho internacional y han sido inducidas a violar su propia Constitución al ignorar el estatus diplomático del Enviado Especial de Venezuela Alex Saab, quien permanece secuestrado desde el pasado 12 de junio de 2020.

Las presiones políticas y económicas de los EE.UU. hacia la pequeña nación africana han derivado en la negativa de cumplir las 2 sentencias emitidas por la Comunidad Económica de Estados de África Occidental (Cedeao), así como el fallo del Comité de Derechos Humanos de la ONU, que determinaron la ilegalidad de la detención del diplomático Alex Saab.

Recientemente, el abogado defensor Femi Falana declaró a la periodista estadounidense Anya Parampil que el artículo 6 de la Carta Africana de Derechos Humanos y de los Pueblos, de la que Cabo Verde también es signatario, establece la ilegalidad de la detención del diplomático venezolano.

“Sobre esta base, el tribunal decidió ordenar la liberación inmediata del Sr. Alex Saab y también anuló el procedimiento de extradición”, explicó Falana.

En ese sentido, Falana expresó su confianza en que “los jueces de Cabo Verde en ese tribunal sean capaces de reunir el valor para defender el Estado de Derecho, defender la justicia y defender los derechos humanos”.