Al menos dos muertos tras el «uso indiscriminado» de bombas lacrimógenas y perdigones de la Policía contra los manifestantes en Perú

Miles de personas han salido a las calles de Perú en el sexto día de protestas contra la destitución del expresidente Martín Vizcarra. Según medios locales, la Policía peruana disparó perdigones y lanzó bombas lacrimógenas contra los manifestantes para dispersar a la multitud.

La fuerte represión policial fue denunciada por la Defensoría del Pueblo de Perú, que ha solicitado a las instituciones de control «no hacer uso excesivo de la fuerza». Además, el organismo confirmó la muerte de un joven debido a los enfrentamientos en las movilizaciones y exigió una investigación objetiva para esclarecer las causas del deceso.

La víctima, de aproximadamente 25 años, habría llegado sin vida al hospital Guillermo Almenara de Lima tras participar en las manifestaciones. «Tiene múltiples heridas en tercio superior del tórax, cara y cuello, aparentemente por perdigones», explicó el gerente del establecimiento, Jorge Amoros.

El médico añadió que hay tres pacientes adicionales que «llegaron con contusiones». Además, en redes sociales, la Defensoría informó sobre un ciudadano alcanzado por una bomba lacrimógena y una joven herida. Mientras tanto el Ministerio de Salud confirmó durante la noche un total de 98 personas atendidas tras las manifestaciones.

«Lamentamos profundamente el fallecimiento de un joven durante las protestas en Lima. La Defensa Pública del MINJUSDH se encuentra en el Hospital Almenara para brindar asistencia y asesoría legal a la familia en cuanto se haga presente», expresó el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos.

Poco después del primer deceso, se reportó una segunda víctima mortal, identificada como Inti Sotelo Camargo, de 24 años de edad, quien habría llegado con una herida grave en el tórax, ocasionada por armas de fuego, conforme al detalle del Seguro Social de Salud de Perú.

Previamente, la Defensoría del Pueblo exigió «al ministro del Interior de Perú explicaciones públicas sobre el uso indiscriminado de bombas lacrimógenas y escopetas de perdigones contra manifestantes que marchaban pacíficamente».

Por otra parte, un grupo de jóvenes lanzó piedras y trató de desinstalar las rejas colocadas en una zona por los agentes, elevando las tensiones que conllevaron el disparo de perdigones por parte de los efectivos.

En este sentido, la Defensoría del Pueblo también instó a quienes se encuentran en la movilización a «respetar los cordones policiales, evitar actos violencia y no usar pirotécnicos porque generan temor y pueden causar estampidas».

No obstante, también se declaró que en otras zonas la respuesta policial fue excesiva a pesar de que la marcha transcurría de forma pacífica, donde los manifestantes solo danzaban y gritaban consignas que respaldaban su postura.

En el transcurso de la jornada, la Defensoría del Pueblo también denunció la «detención arbitraria de dos personas dedicadas a la impresión de afiches durante las protestas». En este sentido, invocó al juez penal de turno para liberar de forma inmediata a los involucrados.

 

Redacción RT