El llamado «encuentro parlamentario mundial por la democracia en Venezuela» reunió solamente a cuatro legisladores que apoyan al autoproclamado Juan Guaidó, y que culminó con otro fracaso para la oposición venezolana.

El parlamentario español Javier Maroto, quien al igual que sus tres colegas del derechista Partido Popular español arremetieron contra Venezuela con insultos, amenazas de más sanciones, todo esto aupado por la oposición venezolana.

«Vamos a adquirir el compromiso para que gente así (los diputados chavistas) pueda sufrir también sanciones individuales adicionales que hoy no están siendo tomadas», amenazó Maroto.

«Quiero decirle senador (Maroto), como decía (Hugo) Chávez, váyase a la mierda, que en Venezuela hay un pueblo libre, soberano, que no negocia su libertad», exclamó desde la tribuna de oradores Gerardo Márquez, del Partido Socialista Unido de Venezuela.

La sesión fue tan tensa que un diputado opositor intentó quitarse la chaqueta para retar a golpes a colegas chavistas.

El diputado chavista Julio Chávez le reprochó a los invitados que si ingresaron al país había sido por decisión del «gobierno legítimo» de Maduro.

«No estamos solos», resaltó por su parte Guaidó, quien 10 meses después de haberse autoproclamado mandatario no ha logrado desplazar a Maduro y en las últimas semanas ha visto seriamente comprometido su poder de convocatoria a protestar contra el gobernante socialista.