Ramos Allup
Foto: Lechuguinos.com

Juramentarán nueva junta directiva de la AN

Llegó el tan esperado 5 de Enero, fecha en que esperamos ver, en Cadena Nacional como el decrépito y hablachento actual presidente de la Asamblea Nacional adeco-burguesa en desacato, y ya precandidato presidencial por la maltrecha oposición Henry Ramos Allup terminar el periodo más nefasto y gris que ha tenido nuestra AN.

Sin pena ni gloria, o peor aún con mucha pena y nada de gloria, termina este primer año de gestión legislativa con mayoría opositora, que al igual que los ofrecimientos que realizaron en su campaña, estuvo llena de falsas promesas, mentiras, violaciones vergonzosas a la carta magna e intentos fallidos de derrocamiento al presidente constitucional.

Desde la Asamblea Nacional tristemente no se legisló, más bien fue el centro de reunión conspirativa de donde salieron los más terribles llamamientos a un inminente derramamiento de sangre entre hermanos, gracias a Dios detenido, solo por la conciencia pacifista y la madurez política que ha alcanzado este pueblo, gracias al comandante Chávez.

El temor y la prepotencia contra ese mismo Chávez, al que jamás pudieron vencer en vida, llevó a Ramos Allup, en el mismo momento que tomó juramento solo, como un emperador, recordándonos la golpista juramentación de Carmona Estanga, a tomar la decisión de sacar a Chávez y a Bolívar de las instalaciones de la Asamblea Nacional, creyendo desde su mundo falto de líderes e ideología que de esta forma borraría de un plumazo todo lo sembrado por estos líderes en el alma de los venezolanos.

Esta primera decisión, desenmascaró lo que se venía repitiendo desde las filas revolucionarias y muchos se dejaron embaucar por el espejismo electoral creado por las empresas de medios que llevaron la campaña opositora: todas sus promesas de cambio eran una farsa para hacerse del poder.

Lo cierto, es que hoy desde cada rincón del país, la mayoría le cantará a Ramos Allup “se va, se va, se va” mientras el presidente Nicolás Maduro, más consolidado que nunca desde Miraflores, verá el cambio de presidente de esta Asamblea Nacional, adeco-burguesa que continua en desacato .

 

 Redacción Lechuguinos